18 de enero de 2012

Código de Buen Gobierno

Hoy he recibido uno de esos correos electrónicos que te envían criticando a los políticos, sobre todo sus gastos y privilegios. No era un correo actual, creo que lleva varios meses danzando, e incluso he visto que hacía referencia al anterior Gobierno. Como casi todos los emails de este tipo los miro de pasada, pero en este concretamente había algo que me ha llamado la atención, sobre todo por mi desconocimiento del tema.

Resulta que el Consejo de Ministros de 18 de febrero de 2005 aprobó un Código de Buen Gobierno de los miembros del Gobierno y de los altos cargos de la Administración General del Estado, publicado en el BOE del 7 de marzo de ese mismo año.

Sabía que había una Ley que regula los conflictos de intereses de los miembros del Gobierno y de los altos cargos, pero no tenía ni idea de que hubiese nada parecido a este Código de Buen Gobierno.

Dice en el acuerdo por el que se aprueba este Código que "La elaboración de este código responde fielmente a las líneas directrices de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) y otras organizaciones internacionales, por lo que supone una eficaz política de prevención y gestión de estos conflictos, acorde con experiencias similares adoptadas por otros países de tradición y raigambre democrática".

En un párrafo anterior indica que "en el momento actual, se hace necesario que los poderes públicos ofrezcan a los ciudadanos el compromiso de que todos los altos cargos en el ejercicio de sus funciones han de cumplir no sólo las obligaciones previstas en las leyes, sino que, además, su actuación ha de inspirarse y guiarse por principios éticos y de conducta que hasta ahora no han sido plasmados expresamente en las normas, aunque sí se inducían a ellas y que conforman un código de buen gobierno".

La verdad es que después de leerlo no sabía si sonreír o apesadumbrame, lo que coloquialmente se llama reír o llorar.

España es un país falto de transparencia en comparación con esos otros países de "tradición y raigambre democrática", es más, es un país con la mala costumbre de legislar mucho y obligar a cumplir poco, y precisamente en materia de transparencia, o acceso de los ciudadanos a la información pública no tenemos aún ley. País de contradicciones.

Bueno, este código se divide en tres grupos de principios: Principios básicos, principios éticos y principios de conducta.

Entre ellos se nombran: objetividad, integridad, neutralidad, responsabilidad, credibilidad, imparcialidad, confidencialidad, dedicación al servicio público, transparencia, ejemplaridad, austeridad, accesibilidad, eficacia, honradez...

Hay cosas curiosas: no deben aceptar tratos de favor, no influirán en la agilización o resolución de trámites administrativos para su entorno familiar y social, administraran los recursos públicos con austeridad, se rechazará cualquier regalo, favor o servicio en condiciones ventajosas.

En el desempeño de sus funciones serán accesibles a todos los ciudadanos y extremarán la diligencia en contestar a todos los escritos, solicitudes y reclamaciones que estos realicen (aquí me cabe la duda sobre si incluyen también las redes sociales, para aquellos miembros del Gobierno y altos cargos que se hayan abierto un perfil).

Se abstendrán de realizar un uso impropio de los bienes y servicios que la Administración General del Estado pone a su disposición por razón del cargo, garantizarán la constancia y permanencia de los documentos para su transmisión y entrega a sus posteriores responsables...

Dejo para el final el apartado cuarto y último: Cumplimiento del Código de Buen Gobierno.

1. Anualmente el Consejo de Ministros conocerá un informe elevado por el Ministerio de Administraciones Públicas, sobre los eventuales incumplimientos de los principios éticos y de conducta con el fin de analizar los procedimientos y actuaciones que pueden posibilitar su transgresión y proponer las medidas que se estimen convenientes para asegurar la objetividad de las decisiones de la Administración y de las instituciones públicas.
2. El Consejo de Ministros, en el supuesto de que hubiera incumplimientos de los principios del código, adoptará las medidas oportunas.


¿Alguien "conoce" si se ha elaborado algún informe?, ¿se ha adoptado medida oportuna alguna?

Le hacemos un flaco favor al buen gobierno si legislamos sin la verdadera intención de hacer cumplir la ley. En este caso una Orden. Parecerá entonces que nos interesa poco el tema.

2 comentarios:

  1. Hola

    ¿Cuantas sorpresas nos podremos llevar todavía?
    ¿Cuantas ordenes, códigos, principios, incluso leyes tenemos y se desconocen, obvian o esquivan? "Uy perdón no le había visto." "Me está usted..."

    Seguiremos porque sin duda y desgraciadamente hay tema para rato.

    Saludos
    José Ruiz

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  2. Hola José, es verdad que desconocemos muchas de las disposiciones legales que se publican diariamente en nuestro país, es imposible seguirlo, incluso en aquellos temas que más nos interesan. Sigo creyendo que se legisla demasiado.

    Es verdad que el desconocimiento de la ley no exime de su cumplimiento, pero algunas aún conociéndose no se cumplen, o como bien dicen se obvian o esquivan.

    Un saludo.

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